Semana Santa: pasión, muerte y resurrección de Jesucristo
- pridecompridecom
- 1 abr 2018
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La más importante para la comunidad católica, inicia el domingo de ramos, continúa el jueves y viernes santo, el sábado de gloria y termina el domingo de resurrección.
El Viernes Santo es una festividad cristiana en la cual se conmemora la muerte de Jesús de Nazaret, se celebra durante la Semana Santa después del Jueves Santo y antes del Domingo de Resurrección o de Pascua, este día, la Iglesia católica manda a sus fieles, como penitencia, a guardar ayuno y abstinencia de carne, tampoco se celebra la eucaristía, sino la liturgia de la Pasión del Señor.
Es un día fundamentalmente de duelo durante el cual se recuerda la crucifixión de Jesucristo en el Calvario, quien se sacrifica para salvar del pecado a la humanidad y darle la vida eterna, de allí que la cruz se haya tomado como el símbolo de la gloria para la adoración de los cristianos.

El “Día de la Pasión y Muerte de Jesús”, en la ciudad de Trinidad, se realizó el traslado, por los Apóstoles del Cabildo Indigenal, de la Sagrada Imagen del Santo Cristo Crucificado, desde el interior de la Catedral al atrio, que se convierte en el Calvario en la ciudad de la Santísima Trinidad. De igual manera se dio lectura a las Ultimas 7 Palabras de Jesús en la Cruz.
Niños, jóvenes y ancianos del Cabildo Indigenal realizaron guardia alrededor del atrio de la Catedral, convertido en al Calvario de Jesús, donde se observaba la imagen del Cristo Crucificado, una representación tradicional que año tras año está a cargo del Cabildo Indigenal de esta ciudad.

La mañana de Viernes Santo se desarrolló el Vía Crucis Juvenil, que dio inicio en la Cruz de Mayo y finalizó en el templo de La Santa Cruz. Para posteriormente desarrollar el Vía Crucis Popular dentro del templo y confesiones.
Sábado santo, es la espera y acompañamiento a María. Durante los primeros siglos de la Iglesia, era costumbre bautizar por la noche del Sábado Santo a los que querían ser cristianos, ellos se preparaban durante los cuarenta días de Cuaresma y acompañados por sus padrinos, ese día se presentaban para recibir el Bautismo, y hacían penitencia pública por sus faltas y pecados. La Vigilia Pascual conserva ese sentido y permite renovar las promesas bautismales y acercarse a la Iglesia con un espíritu renovado.
Este es el único día del año en que la Iglesia hace silencio y en silencio espera celebrar, de una manera más consciente, la resurrección del Señor, espera que se manifiesta en un recogimiento interior profundo.
En Trinidad dentro el Sábado Santo es el “Día de la Gran Espera”, a las 9 de la mañana en el templo parroquial la Santa Cruz, se desarrollará el Vía Crucis acompañando en su retorno a la Madre Dolorosa y confesiones.
La Solemne Vigilia Pascual se desarrolló en diversas parroquias San Martín de Porres, Nueva Trinidad, Sagrada Familia, San José, Fátima, Sagrado Corazón, Catedral, Pompeya, San Francisco de Asís, La Resurrección y La Santa Cruz.
Domingo Santo, tercer día del Triduo Pascual, la promesa se cumple y Jesús resucita, es el paso de la muerte a la vida eterna, se considera el fundamento de la fe de los católicos.
FUEGO NUEVO
El sacerdote apaga todas las luces de la Iglesia, enciende un fuego nuevo con el que prende el cirio pascual, que representa a Jesús, sobre el cirio marca el año y las letras griegas "Alfa" y "Omega", que significan que Jesús es el principio y el fin del tiempo y que este año le pertenece.