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Morales: “Bolivia acudió al templo de justicia donde los pueblos solucionan en paz sus controversias


El presidente Evo Morales pidió el lunes, al cierre de los alegatos orales de Bolivia en la Corte Internacional de Justicia de La Haya CIJ), justicia y remarcó que su país acudió al "templo de la justicia", donde los pueblos solucionan sus controversias en paz, en apego a la Carta de Naciones Unidas.

Tras una audiencia en la que los abogados bolivianos remarcaron la obligación que tiene Chile de negociar una salida soberana al Pacífico, tras varios episodios en los que negoció esa demanda, el mandatario boliviano felicitó a los letrados nacionales e internacionales por su trabajo y subrayó que "el retorno al mar no sólo es posible, sino inevitable".

"Hemos venido a esta importante Corte a tender puentes de entendimiento y no muros de enfrentamiento, por esta razón el 23 de marzo de 2011 tras experimentar en persona el juego de ofrecimientos y promesas, que finalmente termina en desconocimientos e incumplimientos, que decidí traer nuestro caso hasta este templo de derecho y justicia, preservando la paz, la seguridad entre nuestros pueblos y buscando justicia, tal como lo señala la Carta de las Naciones Un idas", remarcó en una declaración de prensa en puertas del Palacio de La Paz.

A contramano de los argumentos de Chile, que aseguran que la demanda boliviana pretende vulnerar y modificar el Tratado de Paz y Amistad de 1904, que fijó los límites entre los dos países luego de la invasión chilena y posterior guerra en 1879, aseguró que Bolivia no busca la revisión de ese pacto, sino demostrar tres ejes incuestionables.

El primero, que la negociación es un "poderoso instrumento", que permite ayudar a solucionar las controversias históricas entre los Estados, "espíritu con el que Bolivia ingresó su caso" a la CIJ, donde los pueblos y Estados "solucionan pacíficamente sus controversias, para que reine la razón y no la fuerza".

"Segunda: que el pueblo boliviano ha caminado y seguirá caminando su ruta hacia el mar, sin cansancio y con plena fe de que un pueblo que permanece unido puede absolutamente todo. El retorno de Bolivia al mar no solo es posible sino es inevitable", refrendó.

El presidente boliviano afirmó que Bolivia está segura de que la solución de su demanda marítima servirá de ejemplo al mundo, "para resolver tantas otras disputas que no pueden, ni deben quedar abiertas".

"El Siglo 21 será un siglo de paz y de reencuentros, donde los estados estén dispuestos a abandonar unilateralismos, intervencionismo y sometimientos", subrayó.

Morales agradeció al pueblo boliviano, "que sin excepción alguna" acompaño las audiencias históricas en La Haya.

"Al equipo jurídico nacional e internacional que durante todos estos años dejó su alma y corazón en este caso que es el más importante de nuestra historia", complementó.

El mandatario boliviano dijo nuevamente que extiende a Chile "la mano fraterna de Bolivia y dijo que es su deseo que, tras el juicio, les permita a ambos países entrar en un estado de reflexión y "serenamiento".

"Esperamos que, tras haber escuchado nuestra posición, que también fue explicada al mundo entero, Chile y Bolivia nos encontremos para solucionar una controversia, que nuestras próximas generaciones ya no deben heredar. Mi deseo es asegurar al pueblo chileno que una solución definitiva al enclaustramiento tendrá como contraparte la más amplia apertura de soluciones que nos lleven a una victoria conjunta", argumentó.

Dijo que ambos países deberían constituirse como un "modelo para el mundo entero, sin perdedores ni ganadores, sólo vecinos".


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