Bolivia reconoce a organizaciones sociales chilenas que apoyan su causa marítima
La viceministro de Relaciones Exteriores de Bolivia, Carmen Almendras, y la cónsul general boliviano en Chile, Magdalena Cajías, agradecieron a las organizaciones sociales chilenas que acompañaron el sábado el despliegue de la bandera de la reivindicación marítima del país andino en Santiago, a la par del extendido, a lo largo de más de 200 km, de la enseña azul en el altiplano andino entre las ciudades de La Paz y El Alto.
"Es un día simbólico, de profunda emoción. Se trata de millones y millones de bolivianos, allá donde estén, que hacen latir el corazón con el lema "mar para Bolivia"", afirmó Almendras, luego de seguir por televisión el acto cívico en Bolivia, y el discurso del presidente Evo Morales, en la zona altiplánica de Apacheta, a unos 40 km de La Paz.
"Para nosotros es muy emotivo que ustedes hayan venido aquí de manera espontánea porque somos hermanos, somos pueblos hermanos que hemos compartido historia y tenemos un horizonte que avanzar. El mar es el mar de los pueblos y todos podemos salir ganando del disfrute, del aprovechamiento de un recurso natural que debe beneficiar a la humanidad entera", complementó la segunda de la Cancillería boliviana.
Líderes de la activista de la causa marítima boliviana, Casa Bolívar, con sede en Santiago, el político Frente Amplio y el Centro Cultural Salvador Allende, acompañaron el acto cívico en el Consulado General de Bolivia, enclavado en la avenida Santa María, en la exclusiva comuna de Providencia, en que se vio por televisión lo más crucial de la jornada en Bolivia, la alocución de Morales.
"Pacíficamente nuestros compatriotas de todas las clases sociales, de todos los sectores" se han sumado al extendido de la enseña más larga de la historia, reseñó Cajías.
"Sigamos encontrándonos como pueblos hermanos en esta hermandad que ustedes manifiestan", acotó la diplomático boliviano.
El chileno Juan Cuevas, de la Unión Bicentenaria, en que convergen 400 organizaciones estudiantiles, culturales sociales y sindicales de su país, se declaró "muy contento" al escuchar a las autoridades bolivianas y seguir el acto en Bolivia por la televisión.
"Es un gran acto, es un derecho que se está exigiendo (a Chile). Estamos por mar para Bolivia con soberanía, pensamos que Chile no ha respondido a los compromisos que ha adquirido; éste no es un tema de que el pueblo, el Estado o Evo esté pidiendo lo que está planteando derechamente; se trata de que nosotros respondamos a lo que nosotros ofrecimos", afirmó en declaraciones a la ABI
En reciprocidad a las expresiones de gratitud de las autoridades bolivianas, el activista uruguayo Roberto Stirling, del Frente Amplio, planteó incluso una alternativa a la demanda boliviana de de que se restaure su calidad marítima tras casi 140 años.
"Si la salida al mar de Bolivia debiera ser soberana y la continuidad territorial de Chile debe mantenerse, hagamos un túnel siquiera pero dejemos a Bolivia salir al mar. América Latina tiene que comenzar a compartir los recursos naturales que tenemos", postuló.
"Las generaciones jóvenes van a sustituirnos prontamente con esta libertad de pensamiento de que el continente es uno solo. El pueblo chileno está evolucionando y las generaciones jóvenes están evolucionando", consideró.
La bandera fue desplegada en la jurisdicción territorial del Consulado General boliviano en medio de proclamas "mar para Bolivia con soberanía".
La prensa chilena, cámaras y fotógrafos, trató se captar imágenes del hecho, mas como el acto --materializado enfrente de un edificio emblema de la modernidad y centro financiero empresarial de la capital chilena, el Costanera Center-- se desarrolló en el interior de la legación, declinó finalmente su intención.
Mientras Bolivia cerraba filas, con convicción granítica, alrededor de su reclamo marítimo instaurado ahora último en la Corte Internacional de Justicia de La Haya tras un siglo de cabildeos estériles y profusión de esperanza y candidez, los bolivianos en Chile se sumaron a sus compatriotas migrantes en Japón, China, Alemania, Suiza y Argentina para proclamar su derecho de recuperar una salida al mar arrebatado en 1879.
Hace 139 años Bolivia resignó su efectivo costero de 400 km lineales y 120.000 km2 de riquísimos territorios de desembocadura en el mar Pacífico, que Chile adicionó a su soberanía tras invadir el entonces puerto boliviano de Antofagasta.
La enseña más extensa que recuerde la historia se desplegó el sábado a lo largo de la carretera de 200 km y doble vía que une las ciudades de La Paz y Oruro, en el oeste y suroeste del país andino amazónico.
El "banderazo", como se ha convenido en llamar a este acto pacifista de corte cívico, se verificó a poco más de una semana de la apertura de los alegatos orales, última fase procesal del juicio que Bolivia, mediterránea hace más de un siglo, planteó a Chile en abril de 2013 en la Corte Internacional de Justicia de La Haya para procurarse una salida propia al Océano Pacífico.