Planta Amoniaco y Urea marcará el inicio de la revolución industrial en Bolivia: YPFB
La Planta de Amoniaco y Urea, que será inaugurada el jueves, en la localidad de Bulo Bulo, Cochabamba, marca el punto de inicio de la revolución industrial en Bolivia, porque no solo producirá fertilizantes a gran escala, sino que sus derivados permitirán continuar encarando la industria petroquímica, aseguró el martes Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB). "También puede ser el paso para diferentes industrias petroquímicas, como industrias de pinturas, pegantes y aglomerantes, se utiliza mucho en productos derivados de la urea. Esta planta es, podemos decir, el punto de inicio de la revolución industrial que va sufrir Bolivia. El efecto es multiplicador, la proyección hacia otras industrias es bastante alto", dijo el director del proyecto de Amoniaco Urea de YPFB, Carlos Villar, a la radio estatal Patria Nueva. El funcionario explicó que el tamaño de la planta de Bulo Bulo está categorizado entre las más grandes del mundo y recordó que fue construida con tecnología de punta por la firma surcoreana Samsung Engineering Co. "Los bolivianos podemos preciarnos de tener una planta de producción de urea de las más modernas del mundo", subrayó. Villar remarcó también que la planta de fertilizantes permitirá duplicar el espacio agrícola del país con solo el 15% de su producción, que será suficiente para abastecer el mercado interno, y el resto se destinará a la exportación, inicialmente al mercado de Brasil. La planta, a través de una combustión, obtiene dióxido de carbono e hidrogeno del gas natural, y esos componentes se mezclan con el aire bajo ciertas condiciones físico químicas que permiten generar amoniaco, que es la materia prima de la urea, precisó Villar. El director del proyecto dijo que la operación de la planta requerirá 200 trabajadores, pero su efecto multiplicador permitirá crear al menos 3.000 empleos en el país. La planta de amoníaco y urea se financia con recursos propios del Estado boliviano y demandó una inversión superior a los 800 millones de dólares, según fuentes oficiales. mcr/rm/rsl ABI