La estatal YPFB denuncia que cooperativistas pretendieron hacer volar dos ductos
El presidente ejecutivo de la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Guillermo Achá, denunció la mañana de este martes que cooperativistas mineros pretendieron, el pasado viernes, hacer volar dos oleoductos con la intención de detener el abastecimiento de carburantes en La Paz, Oruro, Potosí y Cochabamba. El daño fue evaluado en Bs 300.000 y se prevé que las tuberías estén reparadas hasta el fin de semana.
La estatal presentó una querella contra al menos siete dirigentes cooperativistas por asociación delictuosa, daño calificado, atentado contra la seguridad y peligro de estrago, tipificados en el Código Penal.
Los atentados denunciados tuvieron lugar en las localidades de Pongo (Yungas de La Paz) y Panduro (a 180 km de La Paz). Según Achá en el primer caso se recurrió al uso de dinamita para afectar el ducto y, en el segundo, se encendió llantas debajo del ducto con el fin de hacer explotar éste.
"Hemos sufrido dos atentados por dirigentes de Fencomin (Federación Nacional de Cooperativas Mineras de Bolivia) en dos oleoductos importantes del sistema de transporte por ductos. El viernes de manera inmediata hemos tenido reportes de sala de control y el domingo cuadrillas salieron en inspección para ver in situ los daños ocasionados", argumentó la autoridad.
Según Achá, el atentado hubiera provocado el corte de suministro de Gas Licuado de Petróleo (GLP), gasolina y diesel al occidente boliviano, la paralización de la exportación vía Arica, Chile, como también la paralización de operaciones del sistema de transporte por ducto al oriente.
"Oruro y La Paz, estas dos ciudades hubieran tenido un desabastecimiento de GLP, gasolina y diesel", argumentó Achá.
Entre el 23 y 25 de agosto, los cooperativistas bloquearon rutas del país, especialmente en el sector de Panduro de La Paz donde se produjo, el 25, la muerte del viceministro de Régimen Interior y Policía, Rodolfo Illanes, y del minero RubénAropaya.
El conflictó también provocó el fallecimiento de los mineros Severino Ichota, Fermín Mamani, en Cochabamba, y Freddy Ambrosio en Oruro; y la detención de al menos 18 dirigentes mineros.
Según calculó Achá, reparar los daños ocasionados demandará una inversión de Bs 300.000 y se prevé que los trabajos estén concluidos hasta el fin de semana.