ENTEL entregó 25 mil Bolivianos a Carlitos
Comprometidos con el desarrollo del pueblo boliviano, una vez más, la Empresa Nacional de Telecomunicaciones – ENTEL, dibuja una sonrisa en el rostro de un niño y promueve la paz en el desarrollo de una familia, ahora Carlitos Rada Melgar, un muchacho que padece de una malformación rectal de nacimiento, podrá seguir una intervención quirúrgica y un tratamiento para llevar una vida normal y feliz.
“Como Entel estamos comprometidos, no sólo brindando una cobertura nacional uniendo familias mediante las telecomunicaciones, sino también demostramos nuestro compromiso con cada ciudadano que vive en nuestro hermoso país, es un placer para nosotros poder brindar la ayuda en todo lo que podamos como institución, esperamos que Carlitos con esta ayuda logre tener una vida normal como todos y en especial un futuro feliz, ya que nuestros niños son la promesa de nuestro país de una Bolivia mejor”, aseveró Alejandro Ledezma, Gerente regional de ENTEL.
Carlitos y su familia llevaban algún tiempo buscando soluciones médicas al problema que aquejaba al menor desde su nacimiento, instituciones privadas y ENTEL propiciaron un monto con el que la familia viajo a ciudad de La Paz en busca de especialistas para la atención del caso del menor, ya que varios órganos estaban comprometidos por el cuadro clínico y algunos se encontraban en peligro.
“Agradezco a la empresa ENTEL, por el apoyo que nos está brindando a mi familia y a mí, un hijo es lo más importante que un padre tiene en la vida, no saben lo doloroso que es ver sufrir a un hijo y no saber cómo poder ayudarlo y peor aún si uno no tiene plata, no esperábamos semejante generosidad, realmente hoy quedamos sorprendidos ante la ayuda para mi niño Carlitos”, manifestó Frey Rada Melgar, papá del menor, al momento de la entrega de Bs. 25,000, para cubrir todo lo necesario de la intervención quirúrgica a la que será sometido Carlitos.
La nacionalizada ENTEL, llega no sólo en cobertura a todo el país, sino que una vez más, a los hogares que más necesitan de ayuda, en este caso la familia Rada – Melgar en la capital Pandina.